La consulta está emocionada. Hemos conseguido mover al grupo a un nivel mas emocional.
Estabamos siete en el grupo. Me han preguntado por mis vacaciones y todo parecía muy estable. Pero no. Sin que nos diésemos cuenta el tono ha viajado desde el hola que tal al llanto sujetado.
Estaba a mi lado y notaba perfectamente como se atragantaba para no llorar. Se le humedecían los ojos y tragaba saliva haciendo un ruido especial, seco, como si la garganta crujiese. Queria llorar. No queria llorar ahi. Delante de todos.
He dejado la terapia volar con más libertad de lo que lo hubiese hecho normalmente. Por un lado veía que el tono emocional estaba subiendo demasiado y por otro no me encontraba con derecho a interrumpir a mi cliente.
No ha habido peligro. El tono ha bajado solo. El cliente se ha expresado. El grupo ha apoyado. Escuchando. Estando. Ha dicho salir mejor. Bien.
Buenas noches.
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